> La Vereda De Los Descalzos: Todas las letras de Durazno sangrando

lunes, febrero 19, 2007

Todas las letras de Durazno sangrando

Encadenado al ánima

Sí, el viejo portal del cielo...

Sí, el viejo portal del cielo...

Sí, el viejo portal del cielo...

pueda enfriar,

los cuerpos de hoy y ayer...

se niega el recuerdo,

por sano y se quema...

En las puertas de una ciudad,

que aúlla sin ser vísta...

Los planetas giran sin saberlo...

así como tu recuerdo vive en ellos...

sin que puedas correr allí...

Las ventiscas en sombras,

ahuyentan el humo,

de unos muñecos que se queman en el alba roja...

y ardiente de locura...

Las caras que asoman la ventana,

quieren cristalizarse en mi pensamiento...

en forma alucinatoria...

en forma alucinatoria...

como si los muebles pudieran hablarme,

de ellos sin moverse...

produciendo ruidos,

incomprensibles,

a mi espalda...

ah...

La noche despide su manera arrogante...

de mecerse donde quiera...

y las ropas de los sirvientes,

caminan por la casa...

La noche llega y tal vez mañana,

no exista el tiempo con sombras...

La noche llega y tal vez mañana,

no exista el tiempo con sombras...

La noche llega y tal vez mañana,

no exista el tiempo con sombras...

La luz se duerme entre las piedras...

La luz se duerme entre las piedras...

sacude sus plumas la avaricia...

salpicando el pasto inmolado...

Los perros vuelan en las piernas de la noche...

que gime el viento frío,

desde al boca de un dragón sin ojos...

El agujero de días de lluvia intensa,

trata de imantar alguna mujer...

sin cara,

que ronda por la casa....

La distancia es un caudal de eternidad,

agazapada sobre la espalda,

de un león...


Durazno sangrando

Temprano el durazno,

del árbol cayó...

su piel era rosa,

dorado del sol...

y al verse en la suerte,

de todo frutal...

a orillas de un río,

su fe lo hizo llegar...

Dicen que en este valle,

los duraznos son de los duendes...

Pasó cierto tiempo,

en el mismo lugar,

hasta que un buen día,

se puso a escuchar,

una melodía muy triste del Sur...

que así le lloraba,

desde su interior...

- Quien canta es tu carozo,

pues tu cuerpo al fin,

tiene un alma...

- Y si tu ser estalla,

será un corazón,

el que sangre...

- Y la canción que escuchas,

tu cuerpo abrirá,

con el alba... -

La brisa de Enero,

a la orilla llegó,

la noche del tiempo,

sus horas cumplió...

y al llegar el alba,

el carozo cantó,

partiendo al durazno,

que al río cayó...

Y el durazno partido,

ya sangrando está,

bajo el agua...


Pleamar de águilas


Cuento las estrellas,

en el libro que un Dios me dejó,

cuento bien las horas,

todo tiempo me disparará,

lejos de aquí...

Atrás del mar,

donde la materia es luz y nada más...

de allí zarpa el barco lento,

pleamar,

con el sol a barlovento,

pleamar...

de águilas...

capitán busca los vientos,

antes de llorar...

De allí zarpa el barco lento,

pleamar...

con el sol a barlovento,

pleamar,

de águilas...

capitán conserva el rumbo,

antes de soñar...

Llega pronto pronto a tierra,

como el cormorán...

si las águilas se esfuman,

amanecerá...


En una lejana playa del animus

Una niña descalza,

anda en la playa,,

como gota de lluvia,

sobre la zarza...

Los aldeanos se van durmiendo,

toda estrella fugaz,

conoce su nombre...

Así como el agua viaja,

conociendo el aire del lugar...

y hoy por fin,

la inmensidad fue el bien...

y hoy por fin,

la inmensidad fue tibia y fugaz...

como el sol...

Solo sé que Dios vendrá...

( ruego que venga ya )

besa el violín,

que ya nunca jamás,

sonará...

bebe la sombra,

de un indio,

en un río divino...

sin querer te marcarás,

hasta que al morir,

buscarás el sinfín,

y antes del alba,

tendrás tu rocío final...


Dios de adolescencia

Ella solo intenta ser feliz,

tropezando está...

nadan hoy sus ojos entre el rimel,

su mentira ya se hundió,

en la hiedra...

¿ Ves ?

en su abismo,

con sus enaguas,

quiere escapar de la cuna...

y tan apurada está,

que atropella al viento en la avenida...

Hoy su inútil pétalo secó,

por su soledad...

y con las campanas se divierte...

pensando que son de aquí,

de la muerte...

Ah, si pudiera,

si ella pudiera abrirse del ser y la nada...

tal vez podría ver,

que su Dios está,

en la adolescencia...

Correrás al fin con frenesí,

por tu libertad...

pero ni bien una lágrima caiga,

mil estrellas juzgarán,

que es en vano...

Ya que Dios,

es un mundo,

en el que amar es la eternidad,

que uno busca...

y no lo pienses más...

que tu mueca está tan despintada...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Poesía pura la del flaco. Apenas lei las letras fui a buscar el disco para escuchar las canciones otra vez. El flaco estaba hermosamente re-loco.
Carla, Capital

Anónimo dijo...

Loco. Todas las letras juntas sin tenerq hacer tantos clic. Vas a poner la de los otros discos?
Anita la cordobesa